Los lugares también tienen valores. Y Latroupe aspira a ser, más que un lugar, un state of mind.
Celebramos el individualismo, pero nos gustan los grupos y lo colectivo. Diseñamos experiencias generando una atmósfera común en la que aflora el espíritu aventurero que hay en todos nosotros. Y lo hacemos comprendiendo que cada persona, cada lugar, tiene su ritmo.
Queremos servir de enlace no solo entre viajeros, sino entre los vecinos de nuestros barrios.
Buscamos experiencias únicas, por eso nuestros hoteles se alejan de la estandarización y capturan la esencia de los lugares donde se asientan.
Nos gusta la gente única, la aventura, el caminante más que el camino. Por eso nos alejamos de las vías más trilladas, pues creemos que se conoce mejor una ciudad viviendo la vida de los barrios que fotografiando sus monumentos. Nuestro target son los young at heart. Nuestras puertas están abiertas para todo el mundo.